Fracturas
Lesiones comunes en adultos mayores que pueden tener graves consecuencias y derivar en pérdida de independencia.
FRACTURAS
1. Fracturas en el adulto mayor.- Son lesiones óseas que ocurren con mayor frecuencia en mayores de 65 años debido a la fragilidad ósea asociada con la osteoporosis, caídas o traumatismos leves. Las más comunes incluyen fracturas de cadera, muñeca y vértebras, y su impacto en la movilidad y calidad de vida puede ser significativo.
2. ¿Cuándo deberías preocuparte?
Consulta a un geriatra si el adulto mayor presenta:
-
Dolor intenso en una extremidad o región tras una caída.
-
Deformidad visible o incapacidad para mover una parte del cuerpo.
-
Dificultad para cargar peso, como apoyarse en su propia pierna.
-
Fracturas recurrentes tras caídas mínimas o sin causa aparente.
-
Cambios en la postura o altura, que pueden indicar fracturas vertebrales.
-
Pérdida de independencia, tras el episodio de fractura.
3. Causas comunes en mayores de 65 años
-
Osteoporosis: Fragilidad ósea que aumenta el riesgo de fracturas.
-
Caídas: Asociadas a debilidad muscular, desequilibrio o factores ambientales.
-
Traumatismos directos: Por accidentes o golpes.
-
Enfermedades crónicas: Como insuficiencia renal.
-
Medicamentos: Como corticoides, que debilitan los huesos.
4. ¿Cómo se diagnostican?
El diagnóstico incluye:
-
Historia clínica detallada, evaluando el mecanismo de la lesión y los antecedentes de caídas o fragilidad ósea.
-
Examen físico completo, para identificar deformidades, dolor y limitación de movimiento.
-
Pruebas de imagen, como radiografías, para confirmar la fractura y evaluar su gravedad.
-
Densitometría ósea, para determinar el nivel de osteoporosis.
-
Pruebas de laboratorio, si se sospechan enfermedades metabólicas o deficiencias nutricionales.
5. Abordaje y manejo
El tratamiento depende del tipo y localización de la fractura:
-
Inmovilización, con yeso o férulas, en fracturas estables.
-
Cirugía ortopédica, como reemplazo de cadera o fijación interna, en fracturas graves.
-
Rehabilitación física intensiva, para recuperar movilidad y prevenir complicaciones.
-
Tratamiento de la osteoporosis, con calcio, vitamina D y medicamentos específicos para fortalecer los huesos.
-
Prevención de caídas, adaptando el entorno y fortaleciendo músculos con ejercicios.
-
Apoyo psicológico, para superar el miedo a nuevas fracturas y recuperar la confianza.
Un enfoque integral mejora la recuperación, reduce el riesgo de complicaciones y favorece la calidad de vida del adulto mayor tras una fractura.
ARTÍCULOS
FRACTURAS
1. Fracturas en el adulto mayor.- Son lesiones óseas que ocurren con mayor frecuencia en mayores de 65 años debido a la fragilidad ósea asociada con la osteoporosis, caídas o traumatismos leves. Las más comunes incluyen fracturas de cadera, muñeca y vértebras, y su impacto en la movilidad y calidad de vida puede ser significativo.
2. ¿Cuándo deberías preocuparte?
Consulta a un geriatra si el adulto mayor presenta:
-
Dolor intenso en una extremidad o región tras una caída.
-
Deformidad visible o incapacidad para mover una parte del cuerpo.
-
Dificultad para cargar peso, como apoyarse en su propia pierna.
-
Fracturas recurrentes tras caídas mínimas o sin causa aparente.
-
Cambios en la postura o altura, que pueden indicar fracturas vertebrales.
-
Pérdida de independencia, tras el episodio de fractura.
3. Causas comunes en mayores de 65 años
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Osteoporosis: Fragilidad ósea que aumenta el riesgo de fracturas.
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Caídas: Asociadas a debilidad muscular, desequilibrio o factores ambientales.
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Traumatismos directos: Por accidentes o golpes.
-
Enfermedades crónicas: Como insuficiencia renal.
-
Medicamentos: Como corticoides, que debilitan los huesos.
4. ¿Cómo se diagnostican?
El diagnóstico incluye:
-
Historia clínica detallada, evaluando el mecanismo de la lesión y los antecedentes de caídas o fragilidad ósea.
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Examen físico completo, para identificar deformidades, dolor y limitación de movimiento.
-
Pruebas de imagen, como radiografías, para confirmar la fractura y evaluar su gravedad.
-
Densitometría ósea, para determinar el nivel de osteoporosis.
-
Pruebas de laboratorio, si se sospechan enfermedades metabólicas o deficiencias nutricionales.
5. Abordaje y manejo
El tratamiento depende del tipo y localización de la fractura:
-
Inmovilización, con yeso o férulas, en fracturas estables.
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Cirugía ortopédica, como reemplazo de cadera o fijación interna, en fracturas graves.
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Rehabilitación física intensiva, para recuperar movilidad y prevenir complicaciones.
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Tratamiento de la osteoporosis, con calcio, vitamina D y medicamentos específicos para fortalecer los huesos.
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Prevención de caídas, adaptando el entorno y fortaleciendo músculos con ejercicios.
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Apoyo psicológico, para superar el miedo a nuevas fracturas y recuperar la confianza.
Un enfoque integral mejora la recuperación, reduce el riesgo de complicaciones y favorece la calidad de vida del adulto mayor tras una fractura.